Una mujer rescató a un cóndor andino, que al intentar levantar vuelo chocó con un motociclista, en la ruta que une las ciudades santacruceñas de El Calafate y Río Gallegos, en un episodio que trascendió este jueves, cuando la protagonista del hecho compartió una foto y un video en redes sociales.
«Intentando alzar vuelo, esta magnífica criatura choca a un amigo que viajaba en moto desde El Calafate a Río Gallegos. El animal cae al asfalto y decido intervenir», comentó Silvia Zuarez, con una fotografía que compartió en la red social Instagram.
La mujer explicó que al retirar al ave de la ruta observó que tenía dificultades para respirar y pudo comprobar que estaba atragantada con comida, por lo que le realizó una maniobra para que la expulsara y pudiera respirar.
«La examino en busca de heridas visibles y me percato de que se le había atorado comida, que había ingerido recientemente», detalló, quien se convirtió en rescatista del animal.
En un video posterior se ve el momento en que Zuarez lo manipula «de modo que la expulse y resultado de esto, el cóndor consiguió respirar»
«El animal alzó vuelo minutos después. El viajero resultó ileso y la moto sin daños», relató a modo de crónica la mujer, que calificó lo sucedido como «una experiencia increíble».
Zuarez contó a Télam que el hecho ocurrió a unos 30 kilómetros de El Calafate en sentido a Río Gallegos, y que ella transitaba en automóvil «en apoyo al motoviajero que había pinchado una cubierta y todavía tenía 300 kilómetros por recorrer» hasta la capital provincial.
La mujer informó que es originaria de Saladas, en la provincia de Corrientes y reside hace cinco años en Río Gallegos, donde ejerce la docencia en dos escuelas y se acaba de recibir de Técnica en Seguridad e Higiene Laboral en la Universidad Tecnológica Nacional local.
Zuarez acotó que no había tenido una experiencia similar y que «en principio me preocupó que el cóndor se pusiera agresivo, pero no había tiempo que perder».
«Tenía que sacarlo de la ruta, por suerte el motoviajero detuvo el tránsito para que pudiera hacerlo», añadió, al tiempo que precisó que una vez que el cóndor andino logró respirar normalmente «desplegó sus alas y se impulsó hasta alzar vuelo»