Dijo que “forzaron a los trabajadores a salir a la calle”, citando a un par de empresarios, Faija y Zbikoski, los dos grupos empresarios que reúnen a la mayor cantidad de líneas del Area Metropolitana de Buenos Aires (Amba).
Zbikoski es un apellido conocido en Misiones por tratarse de una familia que tuvo y tiene empresas en la Provincia. Sin embargo, a quien aludía el ministro de Economía Sergio Massa al criticar el “paro extraño” del transporte es a Eduardo Zbikoski del Grupo Metropol, quien se apartó de la firma Don Casimiro, en la que sigue al frente su hermano Marcelo.
Ambos dividieron la empresa familiar en el 2012 y Eduardo desarrolló toda su carrera empresarial en Buenos Aires. Desde entonces Marcelo, quien también tiene un par de líneas en Buenos Aires, no integra el grupo empresarial de su hermano.
Paro “forzado”
Massa dijo que se trata el de este viernes de un “paro extraño porque es un paro al que convocaron o forzaron empresarios. El Estado les transfirió la plata de los sueldos y algunos empresarios la retuvieron para forzar a los trabajadores a salir a la calle”.
Agregó que “no están discutiendo el salario de los trabajadores porque los salarios estaban acordados en paritaria y se depositaron. Tampoco están discutiendo tarifa porque no les importa la tarifa”. Indicó entonces que de cada 100 pesos que se paga con la Sube 80 pesos lo pone el Estado.
Manifestó que “lo que pretendemos al final del camino es que cada argentino, cada argentina tenga su Sube y la plata que pone el Estado vaya derecho al trabajador, no que la intermedie el empresario. Y que el trabajador elija si lo gasta en colectivo, en tren”.
Habló entonces de “dos grupos de Faija (Angel) del grupo Dota y Zbikoski que pretende tomar a de rehenes a los trabajadores para discutir el sistema de compra de carrocerías porque fabrican carrocerías”.
Apuntó Massa: “pretenden que el Estado les garantice la rentabilidad. Nosotros creemos en los empresarios argentinos que generan trabajo, que corren al banco todos los días para pagar sueldos, para pagarle a sus proveedores. Creemos en los empresarios argentinos que arriesgan, que apuestan. Pero a los que son parásitos del Estado y pretenden extorsionar les decimos no les tenemos miedo. Los vamos a enfrentar para defender el derecho de la gente a viajar para ir a trabajar”.