El miedo es una respuesta del cerebro primitivo que está presente desde la creación del hombre y la mujer, y existen dos tipos de miedos, uno es el que protege a las personas de situaciones peligrosas y otro que las frena de vivir su vida al máximo, por ello en el segmento de «Un camino para Conocerte», la escritora Paula Vogel y la psicóloga Natalia Houghan aconsejaron acerca de cómo superar este sentimiento y lograr una evolución como personas.
Las profesionales refirieron que se debe diferenciar el miedo real del miedo psicológico, mientras que el primero cuida a la persona y a su integrar el segundo lo mantiene en una burbuja de cristal que lo paraliza de vivir del presente.
Asimismo mencionaron que este miedo psicológico denota una autoestima baja, porque se sobrepasa respecto a la mirada del otro, la profesional de la salud mental, Houghan dió el ejemplo, acerca del temor a hablar ante público y que la mente proporciona la solución de quedarse callado, en su mundo donde no será el centro de atención, manifestó la especialista: «El pensar en la mirada del otro hace que nuestra mente genere situaciones que pueden ser ficticias y que eviten que vivamos y nos estancamos en el presente»
Relaciona estas creencias con el cerebro reptiliano, la parte más primitiva del cerebro, está que alienta a la persona a quedarse en su zona de confort, por la falsa sensación de seguridad que proporciona.
«El miedo es un dragón, que si uno lo enfrenta por la espalda estará blindado, por eso hay que enfrentarlo de frente» expresó Houghan relacionado con encarar el miedo de frente y observar que no es un gigante si no que era la mente la que jugaba una mala pasada, trayendo a colación una situación que no era de ese modo.
Ante el caso del deseo de emprender, dejar un trabajo seguro por perseguir un sueño, señalaron que lo primero no es pensar en negativo o en el fracaso, saber que son emociones que alertan de un cambio que puede ser para mejor, y reconocer que el verbo fracasar viene de otro momento de la vida, recomendaron agradecer el momento evolutivo del momento y confiar en el trabajo que se quiera realizar.
«Debemos mirar al miedo y agradecerle por lo que hizo en otro momento, y hacerle saber que se elige otro maestro y otra experiencia en que tenemos convicción que triunfaremos» cerró Houghan.