En la sede del Obispado de Posadas, se desarrolló la primera reunión ampliada de la Mesa de Diálogo, convocada por la Comisión Diocesana Justicia y Paz, para abordar las problemáticas sobre hambre y pobreza, y evaluar propuestas para resolverlo.
Participaron el Obispo de la Diócesis de Posadas, monseñor Juan Rubén Martínez; el vicepresidente de Cáritas Posadas, sacerdote Alberto Barros; el secretario ejecutivo de la Comisión Diocesana de Justicia y Paz, Jorge Antúnez; el secretario general del Movimiento Evita Misiones, Martín Sereno; referentes de la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (Utep), fundaciones y asociaciones civiles que trabajan con comedores y merenderos comunitarios.
La presencia de Cáritas como un importante actor en la lucha contra la pobreza, fue destacada durante la reunión, en la que el obispo Martínez brindó su apoyo y celebró la iniciativa, reconociendo que es crucial abordar estas problemáticas desde una perspectiva colectiva.
Definió a este momento como «muy doloroso y difícil». Es un tiempo para» re-organizarnos desde abajo, donde se puedan pensar nuevas propuestas, y el Estado debe acompañar subsidiando el bien común como la salud, la educación, la alimentación que sabemos que por ahora se cortó desde Nación», lamentó.
Agregó que la caridad es concreta y conlleva justicia. «Veo a muchos de los y las que están acá, que enfrentan esta dura realidad haciendo algo concreto por los otros. Me alegra la iniciativa de esta mesa, donde podamos ayudar y escuchar que es algo clave. Hoy, la búsqueda individualista está a contramano del sentido de comunidad y de la solidaridad con mirada cristiana. Escucharnos es muy importante”, concluyó el Obispo.
Mientras que el sacerdote Alberto Barros, manifestó que existe una batalla cultural sobre la realidad y la dignidad de las personas, donde «hay un individualismo reinante, cuando lo moral es el eje de la discusión, y muchas veces se estigmatiza a los movimientos populares y a quienes se sustentan con un plan social; pero tengamos en cuenta que las personas son víctimas del sistema, como lo indica el Papa Francisco», indicó el párroco.
Emergencia Alimentaria: Optimizar ejecución y recursos
Sereno enfatizó la importancia del encuentro, y la coincidencia de objetivos entre diversos actores sociales, religiosos y políticos en la urgencia de abordar la pobreza y el hambre como problemas que requieren una atención inmediata, coordinada y colectiva.
«El objetivo es hacer un diagnóstico detallado y preciso para plasmarlo en un documento con propuestas concretas, y articular con todos los niveles del gobierno provincial, municipales, y también con la Nación, para que a partir de esas propuestas se puedan generar soluciones necesarias para nuestro pueblo», expresó el dirigente provincial.
Destacó que desde la Utep mantuvieron reuniones previas con Cáritas y algunos sectores de la iglesia, preocupados «como nosotros y nosotras» por el nivel de pobreza y el hambre que sufren las familias de muchísimos barrios, y la falta de respuestas concretas del gobierno nacional, que por ejemplo cortó el envío de alimentos desde hace cinco meses. Al compartir esa desazón y accionar en el territorio, propusieron conformar esta primera reunión ampliada de la mesa contra la pobreza y el hambre.
«Tenemos miradas similares y la preocupación por la falta de alcance de la Ley de Emergencia Alimentaria, que antes se complementaba con lo que enviaba Nación; pero ahora ante esa falta, la asistencia que se brinda quedó corta», aseveró el autor de la ley, quien hizo hincapié en la necesidad de actualizarla, «porque al haberse multiplicado el hambre y las necesidades resulta insuficiente».
Sereno pidió que se cumpla integralmente con la distribución de alimentos a comedores, que se destinen más recursos y se optimice la ejecución. «Hay municipios que incumplen, no sabemos si por desinterés, negligencia o por insensibilidad ante familias que la están pasando muy mal. La norma ya es insuficiente por el aumento de la pobreza, y los problemas económicos como la inflación y el congelamiento salarial».
Respecto a las auditorías a los movimientos sociales y cooperativas que propone Nación, Martín Sereno expresó su disposición; pero cuestionó su utilización para justificar recortes en servicios esenciales. Subrayó la importancia de construir una «opción política que devuelva la esperanza al pueblo y verdaderamente comprometida con transformar la realidad de quienes los sectores más vulnerados», enfatizo el referente del espacio político Tierra, Techo y Trabajo.
Acciones para enfrentar desafíos sociales
El secretario ejecutivo de la Comisión Diocesana de Justicia y Paz, Jorge Antúnez, coincidió que con la reunión buscan acciones concretas y estratégicas para enfrentar los desafíos sociales, con la urgencia de una respuesta coordinada y comprometida.
«Propiciamos un espacio de diálogo en el que las y los actores sociales puedan participar activamente en la discusión y búsqueda de soluciones. Es alentador que en este primer encuentro estuvieran más de 15 referentes de distintos ámbitos y de varias organizaciones, todos involucrados en el proceso de constituir la Mesa de Diálogo y asumir la realidad que nos duele, nos aflige, nos interpela como es el problema del hambre, la pobreza, el trabajo y fundamentalmente la dignidad de la persona humana”, señaló el secretario de Justicia y Paz.
En referencia a la metodología de trabajo, Antúnez explicó que desde hace un mes, iniciaron el proceso enviando consultas por escrito y manteniendo reuniones con diversas organizaciones sociales, con la idea de recopilar aportes y opiniones de manera escrita, que se complementarán con mesas de diálogo más amplias que se reunirán mensualmente y continuando con el trabajo durante todo el año.
«Esta es la idea fundamental, porque la realidad que hoy nos agobia es urgente y nos demanda no mirar para otro lado», sostuvo Antúnez.