En la reciente Kermés Científica organizada por la Universidad Nacional de Misiones (UNaM) en la Plaza 9 de Julio, con el móvil de C6Digital el docente e investigador del Conicet, Ariel Beltramino, compartió que desde el laboratorio de investigacion se estudia sobre la problemática del caracol gigante africano, una especie invasora que amenaza la biodiversidad y la agricultura en la región.
«Trabajamos en el laboratorio de investigaciones genéticas y moluscos que pertenece al IBS del Conicet y a la universidad. En este laboratorio, tenemos proyectos de investigación y de extensión, y en este caso, nos enfocamos en el caracol gigante africano«, explicó Beltramino.
El investigador destacó la rápida expansión de esta especie. «Se detectó en Iguazú en 2010 y ahora está presente en Posadas. Se ha distribuido por toda la provincia, especialmente en la ruta 12″, señaló. La difusión del caracol plantea serias preocupaciones para la agricultura local.
«El caracol gigante africano es considerado uno de los más peligrosos por su impacto. Es un organismo que se dispersa fácilmente y pone huevos grandes, similares a caramelos mentita. Esto hace que sea fácil trasladarlos sin darse cuenta», advirtió el investigador.
Beltramino también enfatizó los riesgos asociados a esta especie. «Además de ser invasor, transmite un parásito que, de entrar en contacto con humanos, puede alojarse en el cerebro y causar meningitis. Ya hay casos reportados en Brasil, lo que es preocupante para nuestra frontera», explicó.
Los esfuerzos de prevención son clave en este contexto. «El Ministerio de Ecología y Senasa están trabajando fuertemente en la prevención y erradicación de esta especie. Sin embargo, es esencial que la población esté informada sobre cómo reconocerlo y evitar su propagación», afirmó Beltramino.
El investigador mencionó que su grupo de trabajo se dedica a realizar actividades de extensión para concientizar a la comunidad. «Nuestro objetivo es desmitificar el temor hacia estos moluscos. No son venenosos ni pican, pero es importante tener cuidado al manipularlos«, subrayó.
«Si alguien encuentra un caracol gigante africano, lo mejor es usar una bolsa para evitar el contacto directo con su baba», recomendó Beltramino. La educación y la prevención son fundamentales para mitigar el impacto de esta especie en Misiones y proteger la biodiversidad local.