El presidente Alberto Fernández recibió este sábado en el Palacio San Martín al canciller de Alemania, Olaf Scholz, quien realiza una visita por Sudamérica que incluye Brasil y Chile, y tiene como objetivo ampliar el comercio bilateral, el flujo de inversiones y el financiamiento de proyectos. En una conferencia de prensa conjunta, con la presencia de periodistas de ambos países, los mandatarios dejaron definiciones sobre los programas de inversión energética alcanzados y el acuerdo entre Mercosur y la Unión Europea.
Ambos mandatarios remarcaron que proyectan un crecimiento en las relaciones bilaterales entre Alemania y Argentina. En esa línea, Scholz destacó que llegó junto a una comitiva de empresarios y asesores económicos alemanes porque «existen muchas inversiones previstas para el futuro y la delegación ha venido aquí con este espíritu». «Alemania y Argentina son socios de confianza y buenos amigos, tanto en lo político como en lo económico», sintetizó.
Alberto Fernández fue más allá, al sostener que «esta no es una visita más: es muy significativa porque expresa la voluntad de Alemania de estrechar los vínculos». El presidente precisó que «hay empresas alemanas que llevan décadas trabajando en Argentina, invirtiendo y confiando nosotros» lo que provocó que Alemania sea el primer inversor de la Unión Europea en Argentina. «Alemania es un socio de privilegio para nosotros. Nosotros proponemos una asociación estratégica que nos permita ganar a todos», concluyó.
Consultado sobre los acuerdos energéticos consensuados en la reunión, el mandatario nacional precisó que se avanzó sobre «el gas que tenemos en Vaca Muerta, de nuestros yacimiento de litio y de la producción de hidrógeno verde. Todas energías renovables que en Europa, y especialmente Alemania, interesan». En ese sentido, remarcó que existe «interés argentino de atraer inversiones alemanas para poder potenciar todo eso que tenemos» para que «el gas licuado se produzca en Argentina» y que el país se convierta «en un proveedor seguro de gas y energía» para Europa y otras regiones del mundo.
El canciller alemán destacó la prioridad en «que se aprovechen los yacimientos de materias primas que tienen gran beneficio para Argentina», apuntando que existen propuestas en «energía eólica, solar e hidroeléctrica» y, especialmente, en convertir «el gas como tecnología puente». «Para nosotros es importante avanzar de forma que sea un proceso beneficioso para ambos países; que no sea unilateral y que esto se lleve a cabo de forma cooperativa», aseguró.
La guerra entre Rusia y Ucrania fue uno de los tópicos de la agenda. Consultado por un periodista alemán, Alberto Fernández ratificó que «Argentina y América Latina no están pensando en mandar armamentos ni a Ucrania ni a ningún otro lugar en conflicto», pero subrayó que «en el hemisferio norte vuelan misiles y se muere gente, pero en el hemisferio sur eso repercute con mayores costos y con hambre. Lo que pretendo es que Rusia entienda todo el perjuicio que está ocasionando en el hemisferio sur».
Tras la conferencia de prensa, Scholz y Fernández cerraron el encuentro de empresarios de ambos países. El canciller alemán insistió en que «hay empresas alemanas de hace muchísimos años en el país que están establecidas» pero que «se presentan posibilidades de inversión nuevas. Hay muchos temas que hoy nos atañen, para ver cómo podemos realizar el suministro energético». A su turno, el presidente afirmó que «queremos y necesitamos de inversión extranjera en Argentina. La inversión extranjera en Argentina es tratada de la misma forma que se trata de inversión local».
Finalmente, los mandatarios se refirieron al acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur, anunciado en el 2019. «El acuerdo que se ha firmado en los años de Macri y Bolsonaro es un acuerdo que no ha tenido en cuenta las enormes asimetrías que existen entre la Unión Europea y el Mercosur. Algunas se pueden observar fácilmente, como la industria automotriz», manifestó Alberto Fernández en la conferencia de prensa, y precisó que además «hay mecanismos de proteccionismo que aplican países europeos que dificultan el acceso de nuestra agricultura,ganadería y productos lácteos al mercado europeo».
Olaf Scholz, por su parte, destacó la «especial importancia» del acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur, y si bien reconoció que «hay muchos aspectos concretos que se deben hablar» pidió que «no lleve muchos años más sino que se lleve a cabo pronto». El presidente argentino coincidió en que «queremos firmar el acuerdo con la Unión Europea y ponerlo en marcha. Eso le serviría a América Latina y a Europa. También serviría para trazar un eje que potencie el multilateralismo en un mundo que tiende otra vez a polarizarse». (ambito.com)