El presidente Alberto Fernández mantendrá este martes un encuentro bilateral con la Presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, en la Casa Rosada. La reunión de la que también participará el canciller Santiago Cafiero, se enmarca en una gira de la funcionaria de Bruselas que incluye visitas a Brasil, Chile y México. Uno de los puntos centrales de la conversación será el estancado acuerdo comercial entre el Mercosur y la Unión Europea. Argentina y Brasil plantean que hay que “revisar” las condiciones del pacto. Bruselas impulsa como “zanahoria” un nuevo programa de financiamiento.
Las negociaciones se tensan. En 2019 fue presentado como un hecho, pero cuatro años más tarde queda claro que desde ese entonces y también ahora, hay cuestiones pendientes para llevar adelante la implementación del tratado entre los dos bloques. Más aún con las modificaciones que implica en las condiciones de acceso a los mercados europeos para los productos locales el reciente “Pacto Verde”.
A eso mismo se refirió este lunes el presidente de Brasil, Lula da Silva, luego de recibir a von der Leyen. «Le expliqué las preocupaciones que tenemos con el instrumento adicional al acuerdo presentado por la Unión Europea. Esto amplía las obligaciones de Brasil y lo somete a sanciones en caso de incumplimiento. La premisa que debe existir entre los socios estratégicos es la confianza mutua y no la desconfianza y las sanciones”, dijo el mandatario del país vecino.
El Pacto Verde Europeo contiene un conjunto de iniciativas que buscan la “neutralidad climática” hacia 2050. Ese marco normativo golpea de forma directa al equilibrio del acuerdo original. Como ejemplo concreto, desde el Mercosur citan la entrada en vigencia de la Directiva de Energías Renovables (RED II) que propone modificar el umbral de Cambio de Uso Indirecto de la Tierra (ILUC). En el caso argentino, impactará, entre otros, al biodiesel que en 2022 representó ventas por más de u$s 1.800 millones, un 20% del total.
En este contexto, Argentina y Brasil plantean “revisar” el acuerdo teniendo en cuenta las restricciones que implican para el Mercosur las mayores exigencias ambientales. “Queremos un acuerdo revisado con la Unión Europea, adaptado a un mundo y cadenas de valor en transformación”, dijo el canciller Santiago Cafiero en su última visita a Bruselas en enero pasado.
La zanahoria de la Unión Europea
Según pudo saber Ámbito de un diplomático con una extensa trayectoria, tanto von der Leyen como el alto representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrel, tienen intenciones concretas de impulsar fuertemente la relación con América Latina.
Por eso, la Presidenta de la Comisión Europea trajo a su gira una “zanahoria”. Se trata del Global Gateway, un programa de financiamiento con fondos dedicados a la agenda de desarrollo y de apoyo a las tecnologías verdes. Este plan volcará a América Latina unos u$s10.000 millones. Desde la UE informaron que en esta gira habría anuncios concretos sobre la cuestión.
Más allá de que en países europeos como Francia, Belgica y Polonia también hay reparos para el acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur, en el Gobierno explican que el financiamiento para la transición ambiental podría ser una de las claves para destrabar la negociación. Por lo que se espera que sea uno de los puntos que Fernández y Cafiero aborden con la representante del bloque europeo en la Casa Rosada.
Más comercio con los Emiratos Árabes Unidos
Como parte de la estrategia comercial de la Cancillería, Cafiero recibió este lunes en el Palacio San Martín a la ministra para la Cooperación Internacional de los Emiratos Árabes Unidos (EAU), Reem Al Hashimy. La funcionaria arribó a Buenos Aires acompañada de un grupo de empresas y fondos soberanos emiratíes de peso.
Luego de unas treinta reuniones de negocios con firmas argentinas como YPF, INVAP, Pampa Energía, TGS, Riva, entre otras, fuentes oficiales confirmaron a Ámbito que “se concretaron avances para generar nuevos negocios”. El comercio bilateral entre Argentina y los EAU viene creciendo de forma sostenida. En 2022 alcanzó los u$s 1.804 millones pero aseguran que “aún existe un alto potencial para expandir los medios tradicionales de comercio y diversificar las exportaciones en ambos sentidos”.
(Fuente: Ámbito)