El verano, el calor y la humedad son épocas ideales para la reproducción de los mosquitos, es por ello que durante las temporadas cálidas aparecen con más frecuencia y pican más.
En el segmento de Buena Data del programa de las Mamis Misioneras, la pediatra, Andrea Soto, explicó que una picadura es cuando un insecto (mosquito, avispa, abeja, pulga o araña) inoculan sustancias en el cuerpo que irritan la piel, haciendo que aparezcan ronchas en la zona afectada.
Síntomas
- Mosquitos: suelen provocar habones, más raramente ampollas, que pican.
- Avispas y abejas: este es el habón que más duele. Pasadas unas horas después de la picadura el habón suele ir disminuyendo. La diferencia entre avispas y abejas es que la primera no deja el aguijón clavado.
- Garrapata: suele quedarse adherida a la piel y se va hinchando según la succión de la sangre del huésped.
- Arañas y escorpiones: las arañas producen una mancha roja en la piel con dos puntos centrales, mientras que los escorpiones solo uno, que puede doler.
- Chinches y pulgas: ambos producen varias picaduras y ronchas agrupadas sobre una zona del cuerpo. El picor es inmediato.
- Hormigas: cuando muerden la piel se inflama, puede aparecer pus y en algunos casos llega a generarse una ampolla.
La profesional recomendó el uso de repelente de insector, aplicarlo con frecuencia si se está en zona de mayor proliferación de insectos para evitar la picadura y el contagio de enfermedades como el dengue.