La rutina es concebida como una serie de acciones las cuales son costumbres por parte las personas, una responsabilidad a cumplir, como puede ser trabajar, estudiar, o mantener una casa, haciendo diversas tareas como atender a los hijos, al esposo/a, cocinar, limpiar, entre otras tareas y esas acciones, conllevan un cansancio físico el cual suele ser ignorado por las personas, hasta que el índice de estrés se impone al cuerpo y aparecen diferentes afecciones como las migrañas, presión arterial alta, insuficiencia cardíaca, diabetes, aumento de peso, depresión o ansiedad.
Por ello en la nueva edición de Un Camino para Conocerte, la conductora, Paula Vogel, dialogó con la psicóloga Natalia Houghan, para charlar acerca de la importancia de la relajación y de reconocer el tipo de estrés bueno o malo.

Responder al estrés ya sea laboral, estudiantil, o doméstico, según la escritora y conductora del programa se lo puede combatir por medio de actividades que conecten la mente de la persona con su cuerpo, y haya una sincronicidad de los mismos, ya sea a través de lo mas conocido como meditación, bailar, tejer, cantar.
«Si nuestro cuerpo y mente coinciden con esas actividad, es decir que al realizarlas sentimos una conexión entre mente y cuerpo, es por ese camino en el cual vamos a percibir lo que realmente nos pasa»
Paula Vogel
Ademas, Vogel, pidió salir del mito sobre lo esoterico que suele conllevar el significado de la «relajación», y lo valoro como un momento personal con una actividad que estimule la tranquilidad y la liberación de tanta carga mental como física.
Houghan recomendó, «se debe encontrar un momento del día, suele ser difícil, pero encontrarlo, en mi caso puedo recomendar una meditación que tarda 15 respiraciones, puede ser también escuchar música o salir a caminar, para desconectarse con las preocupaciones y todo lo que eleva el cortisol, conocido como la hormona del estrés» expresó.

Asimismo, la especialista explicó que hay dos tipos de estrés, el Eustrés y el Distrés. Mientras que el primero, ayuda a motivar a las personas a trabajar, mejorar su desempeño y alcanzar sus metas, incluso frente a los desafíos. Por su parte el distrés es la respuesta del cuerpo humano refiere cuando se siente en una situación que lo abruma, le da ansiedad y en muchos casos le hace experimentar síntomas físicos y psicológicos, como dolores de cabeza, tensión, insomnio, falta de atención o irritabilidad.

Por ello, Vogel aconsejó no sobrecargarse de actividades o responsabilidades, ya que dicha carga inconscientemente, se está queriendo evitar una verdad o un sentimiento, y suele ser ese momento donde el cuerpo cede y se empieza a enfermar.

Para cerrar, se llegó a la conclusión sobre la reivindicación de la relajación y de un equilibrio entre la desconexión y la distracción, mientras que el primero busca recrear la mente y conectar con lo que se sucede a la persona el otro ayuda a una tranquilidad a corto plazo, donde las dolencias físicas o emocionales volverán una vez que inicie nuevamente la rutina.