Lo destacó el subsecretario de Desarrollo y Producción Animal, Sebastián Rodríguez. Dijo que se trató, por un lado, la exposición de animales y por el otro, la comercialización formal. El remate de hacienda, tanto de bovinos, ovinos como de equinos.
«Fue una actividad interesante, por varios aspectos. Estábamos especulando con cierta incertidumbre con los precios que iban a salir en los remates y salió bien. Hubo toros que superaron los dos millones de pesos, hubo vaquillas que superaron el millón. Eso indica que, por un lado la calidad genética está mejorando cada vez más y por otro, que los productores están dispuestos a seguir invirtiendo», explicó el funcionario del Ministerio del Agro.
Rodríguez sostuvo, además, que el productor que invierte tiene la firme convicción de seguir avanzando.
«Estamos contentos por la calidad genética de los animales y nos genera mucha satisfacción por cuanto desde el Ministerio apostamos por el desarrollo de este tipo de actividades donde se visibiliza la actividad del productor y se le permite generar un negocio con su producción.
Hubo alrededor de 200 animales. No todos entraron a pista. Algunos era de exposición. «Animales de alta calidad genética», insistió el Subsecretario de Desarrollo y Producción Animal.
«Si no hay inversión en genética, es díficil que se avance y se dinamice el sector», senteció.