La decisión fue tomada a fin de poner a disposición de la justicia todos los elementos para la correcta investigación y determinar si existen responsabilidades que les puedan caber al personal policial.
La causa se inició por «supuesto incumplimiento de los deberes de funcionario público, facilitación de evasión, falsedad ideológica y posible cohecho», en una investigación interna iniciada por la Unidad Regional II, donde estarían involucrados el jefe de la dependencia de Villa Bonita, junto a dos oficiales subayudantes y dos suboficiales.
Los mismos habrían procedido a la detención de un hombre el pasado 17 de mayo en la ruta provincial 103, a un kilómetro del ingreso a Villa Bonita, quien junto a un cómplice fueron acusados de intentar asaltar con un arma de fuego a un vecino de la zona, pero se dieron a la fuga cuando observaron que el móvil de la Comisaría recorría el lugar.
Fue así que los efectivos detuvieron a uno de los involucrados y supuestamente secuestraron el arma que habría arrojado. Horas después, el detenido se habría fugado de la dependencia. Mientras que al día siguiente, fue detenido en averiguación de sus antecedentes el segundo acusado.
Estas circunstancias llevaron a que esa regional iniciara averiguaciones sobre el procedimiento, lo cual derivó en una serie de testimoniales, detectando presuntas irregularidades en el proceso.
Por ello, el Juez de Instrucción Uno de Oberá ordenó la notificación de la causa al titular de la Comisaría, a un oficial y al chófer, así como también a un oficial del Comando y un suboficial. Además, la Jefatura de Policía ordenó la remoción de los investigados de las dependencias donde prestaban servicios.