El Gobierno apunta a eliminar el cepo cambiario durante la segunda mitad del año. Para alcanzar ese objetivo debe afrontar una serie de dificultades en el frente comercial, cambiario y de reservas internacionales. A esos obstáculos se podría sumar uno hasta ahora no contemplado. Tres fuentes de distintos sectores confirmaron a Ámbito que en junio de este año vence un tramo del swap vigente con China y de no acordar un diferimiento, Argentina debería reembolsar una parte de los yuanes que utilizó.
En junio del 2023 Argentina y China renovaron hasta mediados del 2026 el contrato de intercambio de monedas entre el BCRA y el Banco Popular del gigante asiático. Pero al margen del convenio general, cada desembolso tiene una fecha de vencimiento propia. Tres fuentes consultadas por este medio, explicaron que uno de los tramos vence dentro de tres meses.
La cifra del vencimiento se desconoce y no se puede revelar porque se trata de información confidencial. En cualquier caso, de no llegar a un acuerdo con China, Argentina debería desembolsar los yuanes que corresponden sólo a ese tramo: “No hubo un solo desembolso de u$s 5.000 millones, estuvo fraccionado”, explicó a este medio uno de los negociadores del contrato original, por lo que se puede estimar que estaría por debajo de este monto.
Relación con China podría complicar negociaciones por el vencimiento del swap
El primer swap con China se firmó en el 2009. Desde ese entonces hasta ahora, cada vez que hubo un vencimiento se pudo “rollear”. Pero la relación diplomática con el gigante asiático atraviesa un momento particular. Pese a los intentos de la canciller Diana Mondino para corregir los exabruptos del presidente Javier Milei durante la campaña electoral, otros gestos como el acercamiento a Taiwán, la marcha atrás con el ingreso a los BRICS volvieron a enfriar el diálogo.
Para colmo, la propuesta que por ahora no muestra avances, pero que el propio Gobierno vuelve a poner en agenda de forma recurrente de cerrar el Banco Central, no aparece como un gran incentivo para los prestamistas que tienen como contraparte justamente a la entidad monetaria.
Los proyectos de infraestructura con China también están paralizados. Las obras que se encuentran en ejecución tienen como cliente al Estado Nacional. Por lo que el Ministerio de Economía debería solicitar los nuevos desembolsos, algo que hasta el momento no se hizo. En esa misma línea, no se registraron avances en la lista de iniciativas acordadas con China en el marco de la Ruta de la Seda.