El decano de la Facultad de Ciencias Exactas, Químicas y Naturales de la UNaM, Dardo Martí, explicó en declaraciones al programa Cadena de Noticias de la señal C6Digital la situación que atraviesa esa Unidad Académica al tiempo que brindó un pantallazo a la realidad universitaria en general.
En el inicio de la entrevista, sostuvo que en general en el sector hay dos cuestiones «bien claras, una económica financiera y la otra política»
Así, señaló que respecto a los cuestionamientos respecto a que en las universidades públicas se hace adoctrinamiento «claramente es muy fácil de contestar». «El 70 por ciento de los estudiantes de las Universidades públicas votaron a este gobierno, entonces el adoctrinamiento en contra del sistema liberal-libertario no estarái funcionando», observó.
Y respecto a las auditorías, Martí indicó que muy pocas instituciones públicas argentinas tendría el nivel de auditoría que tienen las Universidades nacionales. A través de la SIGEN y de las mismas Universidades que tienen convenios con otras instituciones.
En tal sentido, consideró que la pregunta es si la Universidad pública estatal argentina sigue o no. «Ese es el modelo», apuntó. Agregó que se manejan con un presupuesto financiero aprobado en diciembre de 2022. «Esas son las cuotas que estamos recibiendo, tarde y mal. Porque la cuota que depositaron el lunes con intenciones de menguar la marcha es la cuota que deberían haber enviado a principios de marzo. Y un 70 por ciento anterior que habían prometido para gastos de funcionamiento. Eso depositaron en la noche del lunes», puntualizó.
Martí detalló que «si tuvimos un 311 por ciento de inflación el año pasado y un 60-70 por ciento en lo que va de este año, estamos teniendo un 410-430 de inflación». «La tarifa de energía eléctrica fue mucho más que eso en las Universidades. Estamos en un 70 por ciento y lo que se requeriría sería un 320 por ciento para estar igual que el año pasado. Y el salario de la gente que trabaja en las Universidades nacionales estaría por debajo de febrero del año pasado. Ese es el panorama», afirmó.
Según destacó, del sistema de universidades públicas argentinas «estamos orgullosos». «Hay un grupo de personas que pueden tener posiciones políticas partidarias. Sé que hay gente de universidades privadas de origen libertario y están entendiendo que esto es un daño importante a un sistema que funciona», remarcó.
El Decano de Exactas precisó que hay Universidades nacionales argentinas que son grandes y requieren un financiamiento extraordinario, como la Universidad de Buenos Aires, Rosario, Cuyo. «Pero nosotros acá tenemos gastos de funcionamiento y lo que se recibe solo alcanza para pagar la luz y el agua. A toda la sociedad le está golpeando lo que está sucediendo», aseveró.
Respecto a los salarios, Martí aclaró que no depende de las autoridades locales. «El pago de sueldos de los trabajadores de la Universidad Nacionales se hace en Buenos Aires, desde el Ministerio de Economía. Vienen por paritaria particular, se discute un monto y eso es lo que hay que pagar, el trabajador recibe su salario por sistema bancario. Cualquier gasto superfluo, incluso malversación, queda muy expuesto porque nuestros papeles pasan por muchas auditorías», insistió.
Seguidamente hizo referencia a que para gastos de funcionamiento de la Facultad, dado el número de estudiantes de a matrícula, tendría que estar administrando hoy entre 1.500/1.800 pesos por estudiante, por mes. «Lo que vale menos de un alfajor. Claramente estamos hablando de un ahogo al sistema universitario argentino», ejemplificó. Estimó que la matrícula alcanzaría los 8 mil estudiantes aproximadamente.