Los médicos de la Policía de Misiones advirtieron que no se debe ofrecer agua a una persona accidentada, ya que su cuerpo puede estar en estado de shock y podría requerir cirugía o tratamiento médico inmediato. Ingerir líquidos en esa situación puede complicar la atención, interfiriendo con procedimientos necesarios para estabilizar al paciente.
Además, es posible que existan lesiones internas no detectadas, y el consumo de agua podría agravar su condición. Ante cualquier accidente, lo más recomendable es esperar la llegada de los profesionales de la salud, quienes evaluarán la situación y brindarán la asistencia adecuada.