Con el objetivo de mejorar la calidad educativa de los niños, niñas y adolescentes que asisten a escuelas rurales, durante la jornada del 15 de febrero la subsecretaria de Educación de Misiones Rosana “Cielo” Linares se reunió con el equipo jurisdiccional de UNICEF y sus pares de Jujuy, Salta, Santiago del Estero, Chaco y Tucumán para acordar acciones para este ciclo lectivo 2023.
En este contexto, Linares manifestó que “tuvimos un momento de trabajo en modelo taller donde intercambiamos con las otras provincias que participaron las distintas acciones que se llevan adelante en torno a garantizar el acceso, la permanencia y el egreso a estudiantes que habitan en espacios rurales dispersos”.
Agrega que, fruto de estos intercambios, avanzaron en la elaboración de “un informe descriptivo de cobertura y de logros de aprendizaje en la ruralidad para poder establecer recomendaciones respecto a cómo seguir para fortalecer esta modalidad y resguardar el derecho a la educación de los misioneros”.
Este trabajo se enmarca en el Programa «Secundarias Rurales Mediadas por TIC», el cual se implementa desde el año 2012. Esta propuesta educativa está compuesta por una sede ubicada en un centro urbano, a la que asisten todos los días los docentes de las distintas disciplinas del nivel, y por sedes ubicadas en los parajes rurales, donde asisten los estudiantes.
El encuentro de trabajo puso en común las acciones de cada provincia, entendiendo esta modalidad como un eslabón crucial del sistema educativo nacional. Linares comenta que “trabajamos junto a Unicef desde este modelo educativo porque su objetivo y foco principal es garantizar el derecho de los y las adolescentes, que viven en parajes rurales dispersos, a acceder al nivel secundario y finalizar su educación obligatoria sin tener que alejarse de sus familias para hacerlo”.
La Subsecretaria explica que las acciones que se realizan desde el Ministerio de Educación se proponen disminuir la brecha digital existente entre estos adolescentes y aquellos que habitan en los contextos urbanos, fortaleciendo las habilidades digitales, que son clave para su desarrollo como ciudadanos en el siglo XXI y el de sus comunidades.