El proceso de adquisición de la marcha en los niños es compleja y dinámica, ya que según la explicación de la kinesiologa y doula, Magali Ecke, los niños primero deben de conocer su cuerpo y las sensaciones que puede producir el comenzar a marchar con sus dos pies.
Ecke refirió que los niños que están aprendiendo a marchar, comienzan a preparar sus sensaciones desde el pataleo, debido a que en ese momento conocen sus articulaciones, y poco a poco su actividad motriz.
Es importante que nuestros bebés tengan un piso para practicar el ida y venida de la marcha, para que ellos analicen cómo se sienten mientras están parados o caminando, que sientan el cuerpo»
En el programa de las MaMis Misioneras, se mostró la marcha del pequeño Ciro, quien daba sus pasos con dos limones en las dos manos y si no los tenía, la dificultad para andar aumentaba.
Según la kinesiologa, esto se podría llevar a deber que el niño por medio de las contracciones que realiza con los limones en su puño le sirve concentración para tener el control motriz de la parte superior del cuerpo y le ayuda a mantenerse parado contra la gravedad
En este proceso de adquisición intervienen factores motores y de desarrollo biológico, ambiental y emocional.
Se resaltó la importancia de que la tribu de mapadres brinden un espacio seguro para que los peques puedan dar su marcha y de darle al niño algún elemento extra en caso de necesitarlo como en el caso de Ciro.