En medio de las críticas por el brote histórico de dengue que afecta al país, con 129 muertes y más de 180.000 casos, el Gobierno salió este miércoles a respaldar al ministro de Salud, Mario Russo.
“El Presidente (Javier Milei) no trabaja con gente que no es de su confianza y que no tiene su total apoyo. Consideramos que Mario Russo desempeña de manera exquisita sus labores como ministro de Salud”, dijo el vocero presidencial, Manuel Adorni, durante su habitual conferencia de prensa en Casa Rosada.
Unas horas antes, Russo había aclarado que, según los datos disponibles, “la vacuna (contra el dengue) no es efectiva para mitigar el brote”, recalcó que el faltante de repelentes “se va a subsanar” y pidió hacer prevención en las casas.
“Esto no es Covid; es otra cosa”, aseguró Russo. Y sumó, en esa línea: “La mirada que tenemos nosotros, como órgano rector que define calendarios de inmunización, es de suma prudencia. La vacuna que aprobó ANMAT ha superado la fase 3, se mostró segura y eficaz en personas de 4 a 16 años. Ahora queremos recabar datos finales de fase 4, en Argentina y Brasil, para con la Comisión Nacional de Inmunización y ver en qué regiones y grupo etario sería útil aplicarla”.
El funcionario nacional fue terminante con su mirada sobre el debate que se generó alrededor de la vacuna: aclaró que, de acuerdo a la información disponible y según la caracterización de la Organización Panamericana de Salud, “esta vacuna no es de utilidad, no es efectiva, para mitigar un brote”. Y al respecto añadió: “Se necesitarían casi 8 años para mitigar el brote”.
Respecto de la falta de repelentes y espirales contra los mosquitos, Russo relativizó el tema y dijo que es una realidad que tienen “clara pero que es heterogénea”, aunque concedió que en regiones como el AMBA se generó “un cuello de botella que se va a subsanar”.
“Es un problema entre la oferta y la demanda”, aseguró Russo, en diálogo con Radio Continental. “Hablando con ministros provinciales, dijeron que algunos laboratorios de producción estatal, provincial, están generando en más cantidad. Estamos adaptándonos a una nueva realidad epidemiológica”, sentenció el ministro.
Por último, Russo marcó diferencias entre las tareas de prevención del dengue y del coronavirus y señaló la importancia de los trabajos de prevención y eliminación del mosquito “a través de un trabajo domiciliario, peridomiciliario y local, para la eliminación de huevos y larvas”.
“Si eliminamos el vector (por el Aedes Aegypti), eliminamos el dengue. Esto no es Covid”, dijo Russo. Enumeró tareas de descacharreo, prevención, limpieza de hogares y de sectores aledaños a los domicilios como claves para la prevención. “Parece aburrido y poco sofisticado, pero es por ahí. Hay que hacer todos los esfuerzos necesarios, seguir difundiendo, seguir educando, de manera que podamos eliminar el vector”, cerró. (TN)