En Cadena de Noticias se presentó el taller “Proyecto de Vida Joven (PDV)”, una iniciativa creada por María O’Paiella y Eduardo Cazenave que trabaja con adolescentes y jóvenes en momentos de elección vocacional y búsqueda de rumbo. La propuesta está dirigida a quienes se encuentran en el último año de la secundaria o en los primeros pasos hacia una formación futura, con actividades grupales y herramientas de reflexión para que puedan analizar su presente y proyectar un camino posible.
Durante la entrevista, Cazenave señaló que muchas veces la elección de carrera ocurre bajo presión.
Los jóvenes sienten que deben tomar una decisión rápida y definitiva cuando terminan el colegio”, afirmó. En ese sentido, sostuvo que el taller busca abrir un espacio de pausa.

El educador explicó que el proceso de elegir no se reduce a una salida laboral. “El proyecto de vida es una construcción diaria, no una elección para toda la vida”, expresó, remarcando que el acompañamiento apunta a que cada participante pueda reconocer qué le interesa y qué le da sentido.

También se refirió al impacto de los mandatos familiares en el futuro de los jóvenes. “La familia influye, pero no determina. La decisión no puede estar basada en lo que otros esperan”, dijo. Aseguró que el diálogo es clave para que cada persona pueda pensar desde su propia historia y expectativas.

Sobre el rol de la familia, Cazenave planteó que la contención también implica firmeza. “Los límites son los antibióticos del espíritu”, expresó, al tiempo que remarcó que “hay que generar redes de padres apuntando a lograr acuerdos, poner límites a los adolescentes. Los padres tienen que ejercer su autoridad”.
El entrevistado comentó que las redes sociales y la cultura de la inmediatez modificaron la manera en que se transitan las búsquedas personales.

Hoy se confunden los criterios de éxito y fracaso. Se vive bajo una vara que no siempre responde a los deseos reales”.

El próximo encuentro de “Proyecto de Vida Joven” se realizará mañana martes, como una instancia más de acompañamiento para que los jóvenes puedan pensar sus decisiones sin apuros ni comparaciones. “No se trata de llegar primero, sino de caminar con una dirección propia”, afirmó Cazenave.




