En el bloque Ambiente, Sociedad y Sustentabilidad, conducido por Sonia Weisheim, el ministro de Desarrollo Social, la Mujer y la Juventud, Fernando Aníbal Meza, presentó detalles sobre las acciones que gestiona su cartera y la forma de articulación con Nación y municipios. Durante la entrevista, abordó temas vinculados a campañas solidarias, emergencias climáticas, asistencia social, programas laborales y políticas de alimentación que se desarrollan en la provincia.
Sobre la respuesta ante fenómenos climáticos, describió los sistemas de monitoreo y la activación de comités de contingencia: “nos da tiempo a alertar en pocas horas a la familia sobre el crecimiento de la cota”, dijo, y añadió que el seguimiento se concentra en ríos que fluctúan con rapidez, como el Uruguay.

En el plano social y económico, Meza habló de la pobreza estructural y de los programas de transferencia directa
La pobreza estructural es un problema que no se resuelve de un día para otro. Requiere políticas sostenidas y una fuerte presencia del Estado en comedores, merenderos y huertas familiares”.

Según el ministro, la provincia registra casi 370.000 asignaciones familiares y prevé medidas de apoyo para el período de interzafra; mencionó que se acompañan casi 13.000 familias tareferas con módulos alimenticios entre octubre y marzo.
Sobre la gestión de planes laborales y la transparencia, Meza señaló el trabajo de auditoría en los programas provinciales y nacionales: “Estamos trabajando en auditorías y reestructuración de planes como Potenciar Trabajo, porque es importante que cada recurso llegue a quienes realmente lo necesitan”. En Misiones, según el funcionario, Potenciar Trabajo reúne 47.000 beneficiarios.

En materia alimentaria y de primera infancia, el ministro describió la distribución de servicios y espacios: dijo que en Posadas hay nueve espacios de primera infancia y que la provincia cuenta con cinco residencias estudiantiles; además afirmó que impulsan la producción local en comedores: “Impulsamos huertas urbanas y periurbanas, y en muchos comedores ya se produce parte de los alimentos que se consumen”. Con respecto a la primera infancia, agregó que los espacios “van desde los 45 días hasta los cuatro años de edad” y que allí se brinda alimentación y acompañamiento a las familias.





