El incendio consumió alrededor de 120 hectáreas de pastizales en un campo. Para controlar las llamas, se requirieron casi diez horas de arduo trabajo por parte del cuerpo de bomberos policial de Santa Ana, quienes evitaron que el fuego se extendiera hacia las plantaciones y viviendas.
Las llamas se desataron el domingo pasadas las 13 horas, a pocos kilómetros del peaje, en el área rural del cerro de Santa Ana. Al contar únicamente con un camino vecinal, alejado de la zona del incendio, los bomberos debieron ingresar con mochilas hídricas y elementos de zapa, realizando distintos cortes para que el fuego no se descontrolara hacia otras zonas. En el trabajo, se sumaron los brigadistas del Campo San Juan.
Finalmente, cerca de las 23 horas, las llamas fueron totalmente controladas. Ante esta situación, la Policía abrió una investigación, ya que no se descarta que el foco ígneo haya sido iniciado intencionalmente. Por lo tanto, resta el informe pericial de la Dirección General de Bomberos de la fuerza de seguridad.