En el programa Espacio Wellness TV, conducido por Luciana Amado Siry, charló Alejandra Belén Schafer sobre el crecimiento de su marca Besch. Contó que el proyecto comenzó en su casa durante la pandemia, cuando decidió producir prendas sin local físico y trabajar desde un espacio reducido. Schafer explicó que diseñó el concepto y el lanzamiento desde cero, vinculando la identidad de la marca a la venta digital. “Empecé despacito, hice el trabajo detrás antes de lanzar la marca a la web”, afirmó al describir el origen del emprendimiento.
Schafer relató que el desarrollo de Besch transitó por diferentes etapas. Primero realizó ventas desde su domicilio, con clientas que retiraban los pedidos personalmente. Luego alquiló un showroom, incorporó personal y ejecutó campañas fotográficas para difusión. Esa estructura cambió con el tiempo y dio paso a nuevas decisiones. “Alquilé un lugar, tuve mi showroom, lo desalquilé, tuve gente que trabajó para mí. Después, crisis”, resumió sobre ese proceso de reorganización.
También detalló que Besch llegó a espacios relevantes del sector textil. Mencionó su participación en Argentina Fashion Week, en la FIT, y presencia en televisión a través de distintos programas. Schafer agregó que la marca está disponible con ventas internacionales. “La web está habilitada para internacional. Cualquier parte del mundo puede comprar”, comentó sobre la expansión digital y logística.
En la entrevista explicó que eligió sostener Besch con enfoque online por cuestiones de costos y estructura. “No hace falta tener tienda física. Es un gasto importante”, indicó. Actualmente, las prendas se comercializan en un showroom ubicado en Posadas, dentro del espacio Esil en Vuela Alto, que funciona como punto de prueba para el público local. Para el resto del país y para el exterior, la apuesta es el sistema web y redes sociales, que concentran la mayor parte de la actividad comercial.
Schafer describió cuáles son las líneas que definieron la identidad de Besch, entre ellas la corsetería, que impulsó la demanda y fortaleció el posicionamiento en el mercado. Adelantó que proyecta incorporar sastrería con piezas de placard básico y nuevas líneas para el próximo año.
Me gustaría incorporar sastrería básica y desarrollar una colección nueva”
También explicó su metodología creativa: revisar tendencias internacionales, adaptar ideas y sostener una identidad propia. “No es copiar. Busco algo que represente mi marca”, afirmó.
En el cierre de la conversación, Schafer hizo referencia a la tabla de talles y al vínculo con las clientas. Indicó que Besch ofrece desde XS hasta XXL y que se propuso alcanzar un público amplio. “Voy a ser para todo tipo de mujeres. Amplié la tabla lo más que puedo”, sostuvo. Finalmente, reflexionó sobre el rumbo de su proyecto. “Es lo que me apasiona. Quiero que Besch siga creciendo”, concluyó.
