Misiones sigue siendo un oasis en un contexto nacional fuertemente crispado por la campaña electoral y cuando resta una semana para las presidenciales, acaso en su primera vuelta. La afluencia de visitantes, en especial, desde Brasil, aunque también turistas nacionales y de otros lugares del mundo, se ha vuelto una constante, alentada, en el caso argentino, por la política del Pre Viaje.
Pero sería injusto atribuir todos los méritos al exitoso programa nacional, sin dudas, de gran ayuda para todos los centros turísticos del país. Y esto es así porque acá Misiones, fue la primera en abrir sus puertas tras la pandemia y la primera en idear diversos medios de asistencia a una infraestructura turística que había sufrido grandemente con la crisis sanitaria.
Esa crisis sanitaria hizo cierta aquella aseveración de que una crisis es también una oportunidad de cambio y crecimiento. Acá, al menos lo hicieron posibles políticas adoptadas primero con un lanzamiento del turismo interno que comenzó a paliar los déficits que conmovían a todo el sector. Y de a poco comenzaron a llegar los turistas nacionales. Las políticas de apoyo continuaban con créditos, programas de visitas, promociones de los destinos. Hasta un programa que inclusive hoy continúa como el Ahora Taxi destinado a renovar las unidades de la flota de taxis y remises.
Y mientras nuevos destinos se sumaban y robustecían desde los Saltos del Moconá, Salto Encantado, Posadas, Santa Ana, las Reducciones de San Ignacio, Loreto, la política cambiaria agregó nuevo ingrediente a las visitas de fin de semana que realizaban las familias brasileñas atraídas por los atractivos naturales y urbanos (Posadas, una de ellos): aquí todo es más accesible.
Y entonces se viene de turismo breve, pero se aprovecha para compras, especialmente, de los productos argentinos más preciados, como los vinos. Son casi aluviones. Basta conversar con cajeros/as de los súper para comprobarlo. Igualmente, si se recurre a cualquier otro negocio del centro de Posadas, por ejemplo.
Y claro, en los fines de semana largos o extra largos, a esta visita brasileña se suma la de turistas argentinos y ya con cierta regularidad la que se está viendo de extranjeros a quienes igualmente favorece la diferencia cambiaria.
En una semana en la que las corridas cambiaria y amago de la bancaria dominaron la atención pública pudieron observarse comportamientos casi sin alteración en el centro posadeño. Gente de compras, mucha gente comprando. Es más, hay quienes dicen que hubo una suerte de “aprovechar compras”, de todo tipo, buscando el máximo rendimiento del peso, tan denostado por uno de los candidatos a la presidencia.
En Misiones una gran palanca, para el consumo interno, son, además, los programas Ahora que se han transformado en una forma de comprar: hay modalidades, días de compras, plazos diversos. Y si una persona va a apelar a uno de los que funciona lunes, martes y miércoles y su día de compras es un jueves o un viernes. Va al negocio elige y pide una reserva de buena voluntad nomás, sin necesidad de certificados ni papeles. Si no se vende, estará disponible el lunes siguiente.
También hay tiempos de cosechas, en especial si hubo buena siembra (Editorial)https://t.co/15Ivj0KYfC pic.twitter.com/aP5xrnaMvP
— Jorge Kurrle (@jorgekurrle) October 15, 2023